Ésta frase representa de muy buena manera lo que nos pasa generalmente en los proyectos de construcción. Y es que no sabemos diferenciar con precisión las actividades productivas de las que no lo son.
¿Cuál es esa diferencia?
Las tareas consideradas improductivas son aquellas que no agregan valor al producto o servicio final. En otras palabras son un "desperdicio", una "pérdida".
¿Cuáles son estas ocho formas de perder en la construcción?
1. Sobre-producción:
Se refiere a toda aquella producción en exceso, por ejemplo planos demasiado detallados, poco prácticos o innecesarios. Más calidad de la requerida o equipamiento altamente sofisticado, cuando en realidad un más sencillo bastaría.
2. Exceso de inventario:
Muchas veces pensamos que almacenar insumos nos converte en profesionales prevenidos. Pero esto implica máyor espacio de almacenamiento, más trabajadores para gestionar esos materiales o equipos, deterioro, obsolecencia, robo. En realidad el inventario excesivo termina ocultando el problema real que es la ineficiencia.
3. Transporte innecesario:
Cualquier transporte dentro o fuera de la obra produce pérdidas de horas de trabajo, pérdidas de material durante el transporte e incluso accidentes de trabajo. Para evitarlo es importante diseñar una correcta distribución del almacen y la obra.
4. Movimientos innecesarios:
Se refiere a recorridos a pie por la obra que son innecesarios. Éstos provocan baja productividad y falta de seguridad. Para reducirlo es necesario acondicionar de mejor manera el sitio de trabajo.
5. Sobre-procesamiento:
Cuando para la elaboración de un producto requerimos materia prima en exceso, equipos o personal se cae en sobre-procesamiento. Incluso esto aumenta la generación de residuos. Otro ejemplo de ello es el de instalar elementos que desinstalamos para luego volver a instalar.
6. Esperas:
Se refiere a ese tiempo de inactividad cuando falta información cómo órdenes de trabajo o planoo, retraso en el transporte. También en este punto podemos incluir las demoras por falta de financiamiento.
7. Defectos de calidad:
Va desde errores en los diseños, pasando por el desfase entre planos de arquitectura e ingenierías y mano de obra poco calificada. Todo esto se traduce en re-trabajos e insatisfacción del cliente.
8. Creatividad y talento no utilizados:
Por la falta de motivación y escucha a los colaboradores, se pierden ideas, aptitudes e incluso se desperdician oportunidades de aprendizaje. El tener al taleno humano bien preparado y alineado es la mayor fuente de mejoramiento continuo y por ende, reducción de pérdidas.
De una u otra forma debemos entrenarnos y entrenar a nuestros residentes de obra para identificar estas fuentes de pérdida y luego actuar para reducirlas. Así lograremos incrementar la productividad de nuestros proyectos.